¿QUÉ ES EL TOC?

Para lograr un tratamiento efectivo, es necesario entender com- pletamente la naturaleza de los síntomas. El TOC se entiende como un padecimiento en donde la persona experimenta obsesiones y compulsiones recurrentes. Las obsesiones se definen como pensamientos, imágenes mentales, ideas, sensaciones o impulsos intrusivos desagradables, repetitivos y/o inapropiados. Esto genera una variedad de emociones incómodas como incertidumbre, ansiedad, miedo, culpa, angustia, asco y/o vergüenza. Por lo tanto la persona se siente obligada a realizar conductas que disminuyan dichas emociones, las cuales se definen como compulsiones o rituales.

ALGUNOS DATOS SOBRE EL TOC EN MÉXICO:

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el 2.6% de la población mexicana padece de TOC.

Esto quiere decir que aproximadamente 3 millones 68 mil personas luchan contra esta enfermedad.

Este número es equivalente a llenar 30 estadios aztecas. Encontramos que en un salón de clases de 38 personas, 1 padece de TOC.

Por lo tanto en México hay aproximadamente la misma cantidad de gente con TOC que población en Uruguay. El 70% de los mexicanos que padecen el trastorno lo desconoce.

De acuerdo con la OMS, el trastorno obsesivo-compulsivo está dentro de los padecimientos psicológicos con mayor severidad.

Los hombres por lo general lo desarrollan antes que las mujeres, presentando síntomas entre los 6 y 15 años, mientras que las mujeres lo desarrollan en la adolescencia o en los veintes.

El TOC es el cuarto trastorno con mayor demanda en los servicios psiquiátricos y psicológicos en México y su falta de atención puede ocasionar discapacidad, pérdida de empleo, alteraciones en relaciones sociales e interpersonales.

En México las personas tardan en promedio de 7 a 14 años en encontrar un tratamiento adecuado. Pocos profesionales de la salud están entrenados adecuadamente para tratar el trastorno.

POSIBLES CAUSAS SOBRE EL TOC

  • Investigaciones han demostrado que los genes sí juegan un papel importante en el desarrollo del TOC. Los genes parecen ser parcialmente responsables; sin embargo todavía no sabemos qué factores conforman el desarrollo, una enfermedad o incluso el estrés cotidiano pueden inducir genes asociados con los síntomas del TOC a activarse. Algunos expertos piensan que el TOC desarrollado en la infancia puede ser distinto al TOC de la adultez. Por ejemplo, una investigación reciente en gemelos demostró que los genes juegan un papel fundamental cuando se desarrolla en la niñez (45-65%) comparado con los que empiezan en la adultez que presentan una menor incidencia (27-47%).

  • Investigaciones sugieren que el TOC tiene que ver con problemas de comunicación entre la parte frontal del cerebro y estructuras más profundas. Estas estructuras usan un mensajero químico llamado serotonina. Imágenes cerebrales muestran que, en algunas personas, los circuitos cerebrales involucrados en el TOC se pueden normalizar mediante fármacos que equilibran la serotonina, o aplicando la terapia cognitivo conductual (TCC).

  • Puede manifestarse en cualquier momento, desde preescolar hasta la edad adulta, pero por lo general hay dos rangos de edad. El primero se da entre los 10 y 12 años y el segundo entre la adolescencia tardía y la adultez.

SÍNTOMAS DEL TOC

Grados severos de ansiedad, pánico, preocupaciones y miedo.

Altos niveles de incertidumbre, ansiedad anticipatoria y pánico.

Sentirse “atascado” en sus pensamientos, sentimientos y comportamientos.

Falta de motivación para participar en las actividades diarias.

Tiene dificultades para detener los comportamientos compulsivos y se siente mal consigo mismo por ello.

Cuestionan su diagnóstico de TOC y se preocupan "¿Qué pasa si mis pensamientos son ciertos?"

Sentir que su “cerebro se rompió” y que algo anda mal con ellos.

Tal vez la principal característica del TOC es el proceso cíclico durante el cual se intensifican los síntomas. Inicialmente, las personas con TOC realizan las compulsiones y/o evitaciones con el fin de reducir la ansiedad causada por sus obsesiones. Desafortunadamente, la ansiedad causada por las obsesiones sí tiende a disminuir mientras se realizan estos rituales, sin embargo, a fin de cuentas refuerzan e intensifican los síntomas a largo plazo. Con el tiempo, esto hace que las compulsiones crezcan, lo cual provoca todavía más ansiedad por las obsesiones. En otras palabras, la persona con TOC aprende a responder de manera automática a la ansiedad reforzando el TOC.

Muchas personas con TOC también sufren de depresión, desesperanza, baja autoestima y autocrítica significativa. Existe un amplio espectro de posibilidades en cuanto al contenido de las obsesiones y compulsiones ya que varían de persona a persona, aún cuando padecen el mismo contenido de TOC.

ENFOQUES TERAPÉUTICOS

Durante el tratamiento, utilizamos una prueba común para el TOC llamada Escala obsesivo-compulsiva de Yale-Brown (YBOCS) y para niños (CYBOCS) para identificar cada síntoma del TOC y crear un plan adecuado para tratar el TOC y trabajar en acercarte a un nivel normal de funcionamiento cotidiano. Además de administrar esta prueba para el TOC, nuestros especialistas también evaluarán la presencia de otros trastornos, para asegurarse de que estés siendo tratado con la mejor atención. 


Terapia cognitivo conductual (tcc)

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Dentro de la terapia cognitiva conductual (TCC) tenemos un componente que implica la práctica de Exposición y Prevención de Respuesta (EPR), esta modalidad de tratamiento es la más exitosa para el Trastorno Obsesivo Compulsivo y los trastornos del espectro TOC (agregando algunos enfoques como terapia de reversión del hábito, entre otras).

La EPR es una herramienta de terapia conductual que se utiliza para ayudarte a enfrentar tus miedos mientras practicas no involucrarte en compulsiones. El objetivo principal de la terapia EPR es practicar el permitir la presencia de la emoción incómoda y la incertidumbre en lugar de involucrarte en comportamientos compulsivos.

En el tratamiento, te apoyamos de forma compasiva y muy respetuosa a ir enfrentando poco a poco los miedos que se presentan en forma de obsesión y enseñarte a responder de una manera distinta, mucho más saludable y acorde a lo que es importante para ti. A su vez, te enseñaremos herramientas de atención plena (mindfulness) y otras estrategias basadas en evidencia para que puedas relacionarte de una manera distinta con la ansiedad y otras emociones que experimentas día a día.


La atención plena (mindfulness)

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  • En los últimos años, ha habido interés en el concepto de mindfulness o conciencia plena aplicado al tratamiento para la salud mental. Pero la mayoría de las personas, incluyendo las personas que padecen de TOC o trastornos relacionados, no saben con seguridad o no les queda tan claro cómo aplicarla a su vida. A pesar de lo que algunos puedan opinar, la consciencia plena no es una técnica nueva y simple con la cual se pueda implementar de forma rápida y mágicamente eliminar la ansiedad, de hecho la intención de la practica no es eliminar la ansiedad.

    La manera más fácil de entender su aplicación para el TOC y trastornos relacionados es desarrollar la habilidad de la conciencia sin prejuicios y la aceptación de la experiencia del momento presente, incluidos todos los pensamientos no deseados, sentimientos, sensaciones e impulsos. Lo que esto realmente significa, desde una perspectiva de conciencia plena, es que el principal objetivo de la persona no es cambiar ni eliminar los pensamientos no deseados, ni las emociones, sensaciones o urgencias, sino reconocerlas plenamente y aceptarlas. ¡Ojo! Esto no quiere decir que se disfruten o que uno esté de acuerdo con ellas. Más bien, el objetivo de la conciencia plena es reconocer y aceptar que estas experiencias incómodas son aspectos transitorios e inevitables de la vida humana. Desde la perspectiva de la atención plena, no aceptar estas experiencias internas no deseadas es la fuente de gran parte de nuestro sufrimiento auto-inducido. Por lo tanto, la aceptación plena de la realidad de estas experiencias te lleva a reducir ese sufrimiento y cualquier intento de controlarlas.

    Algunas personas tienen la creencia errónea de que la conciencia plena de alguna forma rechaza la terapia cognitivo-conductual. Por el contrario, la conciencia plena puede reafirmar y expandir las técnicas de la TCC. Mientras que la terapia cognitiva tradicional nos enseña a desafiar el contenido de nuestros pensamientos distorsionados, la atención plena se centra más en desafiar nuestra perspectiva hacia estos pensamientos.

    Desde la perspectiva de la atención, el problema esencial es nuestra creencia distorsionada de que los pensamientos no deseados, sentimientos, sensaciones e impulsos son de alguna manera importantes de forma automática y merecedores de una fuerte respuesta de comportamiento. Pero, con la conciencia plena, la meta es reconocer y aceptar que esos eventos internos transitorios, a pesar de ser incómodos, son meramente normales, predecibles y parte de la experiencia humana.

    Del mismo modo, desde la perspectiva de la teoría del comportamiento tradicional, la respuesta más consciente y eficaz a largo plazo para el TOC y la ansiedad es no realizar las conductas compulsivas y evitación comúnmente vistas en estos padecimiento, ya que hacerlo sólo proporciona una reducción a corto plazo del malestar.


Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT por sus siglas en inglés)

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  • La terapia de aceptación y compromiso es una forma de terapia cognitivo-conductual (TCC), de la misma forma que la terapia de exposición y prevención de respuesta (E/PR), así como la terapia cognitiva y la terapia dialéctica conductual (TDC). Todas estas intervenciones comparten ciertos elementos terapéuticos o filosóficos en la misma línea de la TCC. Algunos de los elementos son:

    Visualizar los comportamientos como moldeables o modificables a través de la manipulación ambiental, en lugar de ver a los comportamientos como exclusivamente biológicos, y por lo tanto responsivos a la psicoterapia.

    Centrarse en la forma en la que la persona interactúa o responde a los eventos (incluyendo pensamientos y sentimientos) en su vida en lugar de los acontecimientos intrapsíquicos o las características de personalidad.

    Mientras que la EPR se enfoca en generar nuevos aprendizajes al relacionarte distinto con las obesiones y emociones incómodas generando un nuevo circuito neuronal inhibiendo el círculo vicioso habitual del TOC, el propósito de ACT es guiar a que la EPR sean exposiciones que tengan sentido para ti, que sean dignas de intentarlas y que te acerquen a lo que el TOC te ha alejado. ACT nos ayuda a reducir el impacto y atención que se le da a las obesiones y darle mayor importancia a la forma en la que las experimentamos. La Terapia de aceptación y compromiso (TAC) ve a las experiencias internas, tales como las obsesiones y ansiedad, como parte de nuestras vidas. Las obsesiones y la ansiedad no son eventos inherentemente negativos, pero la sociedad los ve y los trata como tales. ACT se enfoca en encontrar una forma en donde se permita tanto a las obsesiones como a la ansiedad de ir y venir sin interferir en el funcionamiento cotidiano de la persona. Esto es algo que se comparte con la TCC, sin embargo no se explica a profundidad.

    Personas diagnosticadas con TOC o terapeutas que trabajan ellas llegan a tener una reacción negativa a la idea de vivir con obsesiones y ansiedad. Si compartes esta misma reacción al leer el último párrafo, solo date cuenta de tu reacción y contesta las siguientes preguntas:

    ¿Intentar controlar las obsesiones y la ansiedad funciona a largo plazo?

    ¿Al tratar de controlar la ansiedad y las obsesiones realmente logras que disminuyan significativamente?

    Finalmente, ¿tu vida se ha vuelto más libre y significativa al tratar de regular y controlar las obsesiones y ansiedad?

    Si contestaste sí a todas las preguntas, sigue haciendo lo que estás haciendo. Hazle caso a tus experiencias, son más honestas que tu mente. Si contestaste no y lo que estás haciendo no te está ayudando a disminuir tus obsesiones, tu vida se siente más restringida y te estás alejando cada vez más de tus metas, entonces, algunos conceptos de ACT y la EPR pueden ser de gran ayuda.


Exposición y prevención de respuesta (E / PR)

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  • Al igual que la EPR para otros contenidos del TOC, gran parte se reduce a hacer voluntariamente lo que tu mente está haciendo en contra de tus deseos (exposición) y luego resistir la tentación de huir de la incomodidad resultante (prevención de respuesta). Los esfuerzos compulsivos por dejar de pensar en la obsesión solo parecen enseñarle al cerebro que hay algo especial o interesante sobre el tema. En cambio, la ERP tiene como objetivo cambiar la relación entre tu y el hecho de que este pensamiento se está produciendo de esta manera.

RETOS DEL TRATAMIENTO:

Sabemos que para muchas personas la E/PR de inicio suena muy amenazante y que algunos no están listos para probarla. Te ayudaremos a estar listo poco a poco de manera amigable. Hemos visto que cuando uno entiende cómo funciona, puedes estar dispuesto a darle una oportunidad. Recuerda que no haremos nada que tú no quieras. Si te animas, te encontrarás con los siguientes retos:

Renunciar a ciertos beneficios de la ansiedad para encontrar muchos otros a tu alrededor, y su permanencia suele ser a largo plazo.

Enfrentar lo que más temes requiere esfuerzo y determinación (con la supervisión de tu terapeuta y si lo deseas con tu persona de apoyo), una vez que lo logras tu cerebro cambia, para bien, la plasticidad cerebral es una maravilla permitiendote tener la vida que quieres y persona que quieres ser.

Como en cualquier cambio, se necesita de compromiso y disposición, no es suficiente trabajar una hora por semana, necesitas comprometerte a realizar las actividades y exposiciones acordadas en casa, al menos 40 minutos diarios.

MEDICAMENTOS PARA EL TOC

Existen múltiples medicamentos para el TOC que pueden ayudar durante el tratamiento. Las investigaciones muestran que 7 de cada diez personas con TOC se benefician del uso de medicamentos para el TOC. El inhibidor de la recaptación de serotonina (también conocido como ISRS) es el medicamento más común para el TOC y puede ser administrado únicamente por un neuropsiquiatra. Es importante mencionar que no siempre se requiere de un medicamento y que siempre, como en la terapia, todo va a ser una decisión muy personal.